La pelea entre Suiza y Estados Unidos por la plata perdida del cartel de Medellín
Revista Semana 17 de octubre de 2009 Por Daniel Coronell
Una operación de inteligencia financiera suizo-americana para cazar evasores de impuestos de Estados Unidos descubrió la existencia de una serie de cuentas cifradas de miembros de la mafia colombiana. Los depósitos, que pueden sumar al menos 30 millones de dólares, están en cuentas internacionales -abiertas originalmente en Suiza, Luxemburgo y Panamá-
que han permanecido inactivas desde los años 80. Algunos cuentahabientes murieron y otros que sobreviven dejaron quieto el dinero probablemente por temor a que les preguntaran por el origen de los fondos.
La investigación ha encontrado un nombre que se repite como titular y cosignatario de algunas de esas cuentas. Se trata de Carlos Alberto Gaviria Vélez, el hermano de José Obdulio Gaviria.
Hace un tiempo una rigurosa investigación del diario El Espectador reveló que Carlos Alberto Gaviria era el titular de dos cuentas bancarias -aquella vez en Colombia- usadas por quienes pagaron el asesinato de don Guillermo Cano.
A comienzos de este año, el mismo diario descubrió un viejo negocio de tierras entre Carlos Alberto Gaviria y dos de sus primos: Pablo Emilio Escobar Gaviria y Gustavo de Jesús Gaviria Riveros, socios y cabezas del narcotráfico en Antioquia para la época de la transacción.
Pues bien, ahora salen a flote las evidencias de la participación de ese hermano de José Obdulio en las operaciones bancarias internacionales de sus primos mafiosos.
En tres de las cuentas descubiertas, Carlos Alberto Gaviria Vélez figura como titular y beneficiario de los fondos. La primera tiene depositada una cifra equivalente a 1.658.894 dólares y fue abierta en el Banco Crédit Lyonnais. La segunda está en el Banque Génerale de Luxemburgo, tiene fondos por 2.037.400 dólares y figuran como titulares una empresa llamada Galex Venture y Carlos Alberto Gaviria Vélez, identificado con el número 8271876, el mismo número de la cédula del hermano de José Obdulio.
Judicialmente está demostrado que ese nombre corresponde a una identidad falsa que solía usar el capo Gustavo de Jesús Gaviria Riveros. En 1990, cuando Gustavo Gaviria fue abatido por la Policía, los agentes encontraron entre sus papeles una cédula falsificada a nombre de Jesús María Rivero García.
Carlos Alberto Gaviria Vélez le dijo a El Espectador que él -al igual que sus hermanos- nunca tuvo relaciones con sus primos mafiosos. Sin embargo, todas estas evidencias lo contradicen.
De la presencia de Gustavo Gaviria en Luxemburgo en 1986, existe una prueba fotográfica. Allí el desaparecido capo posa en un cantón del principado, célebre por la discreción de su banca, al lado de un enigmático acompañante cuya identidad tal vez pueda ayudar a establecer Carlos Alberto Gaviria.
Otros 22 colombianos, algunos de ellos familiares y relacionados del extinto Gustavo Gaviria, figuran como titulares de las millonarias cuentas.
Como se recordará, dos hermanos más de José Obdulio Gaviria Vélez, hoy empleados públicos, tuvieron líos con la justicia de Estados Unidos por temas de narcotráfico.
Ahora viene la pelea entre Suiza y Estados Unidos por la plata perdida del cartel de Medellín. Una pelea que podría pasar por la petición de extradición de los implicados. Por ahora Colombia no se ha mostrado interesada en recuperar ni el dinero, ni la historia.